A veces tienes que salir fuera, airear tu mente, y recordar quién eres y dónde quieres estar. A veces tienes que aventurarte en el mundo, para volver a encontrante contigo misma.
Seguidores
domingo, 6 de febrero de 2011
La diferencia entre desmoronarse y abrirse es tan leve que resulta practicamente imperceptible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario